Cuando los esquizofrenicos llevan pistola.

Cada día me sorprende más la normalidad con la que la sociedad española ve los abusos a los que nuestras fuerzas de seguridad nos tienen acostumbradas. Nadie se estraña de ver a 5 guardias civiles dando una paliza de muerte a un agricultor en la comisaria, que para colmo la mayoría son exculpados y los que quedan condenados con penas menores.
O ver bajar a los antidisturbios por las calles de Malasaña ensañándose con TODO el que pillan por delante, incluidos los empleados de la limpieza del ayuntamiento de Madrid.
O la violencia desorbitada de cinco aguerridos Mossos, contra un único detenido esposado, en la comisaria del barrio de Andrés,( je je mira a ver chaval yo no andaría muy seguro por la calle).
Y si queréis preguntarle al cantante de la Cabra Mecánica, (al cual se le ha subido la fama a la cabeza) que cometió el gran error de pedir al policía que le había pedido la identificación que se identificara a su vez, a lo cual están obligados por ley, pero con mucha suerte se ríen de ti a la cara, (lo se por que me ha pasado), y con menos suerte corres el riesgo de llevarte el palizón del siglo como fue el caso del cantante citado, se creía que se iba a librar por ser famosete.
Y la última noticia es ver como un valiente mosso cose a balazos (nada menos que tres disparos en el pecho) a un esquizofrenico, que en medio de un ataque le amenazaba con pincharle con un pico y un destornillador, daría risa si no fuese por la gravedad de la cuestión.

Ahora la cuestión es saber quien vigila a los vigilantes, mientras cada vez más gente mira con miedo y desconfianza a las fuerzas de seguridad de este país y los distintos colores de sus uniformes se van tornando cada vez más grises.